domingo, 5 de junio de 2011

Toma la plaza, tira la academia

Los vecinos de la Conce reunidos en asamblea

"Dios ha muerto, Marx ha muerto, Marlene Dietrich ha muerto. Y yo mismo no me siento demasiado bien"
Manuel Vázquez Montalbán, Quinteto de Buenos Aires.

Después de unos días de silencio provocado por exceso de trabajo y estúpidos temas de salud, la que escribe vuelve a la carga. Y empiezo la entrada con esta cita del maestro, de un libro que me ha prestado la otra mitad de este blog, que con su habitual generosidad me provee de lecturas, visto que, a la velocidad a la que leo, una de dos: o compro libros o pago la hipoteca. Quinteto de Buenos Aires es una maravilla más de Vázquez Montalbán, increíblemente bien escrita, poética, mucho más que una novela policíaca, mucho más que un tratado de cocina, un canto al desencanto, un horror de historia donde no hay un asesino: todos son culpables, hasta las víctimas. La obra es de una frescura, de una clarividencia, que parece escrita hoy mismo.

Pero en estos días no he estado quieta. he seguido de cerca y desde dentro la extensión del movimiento 15M a los barrios, participando en las asambleas que han tenido lugar en la Conce y aprendiendo todo el rato de estos jóvenes que intentan cambiar el mundo, escuchando a los veteranos del barrio con sus fundadas opiniones sobre el camino a seguir, exprimiéndome los sesos para dar con el camino que haga pervivir este movimiento...y que sirva de algo. Desde aquí os invito a todos que busquéis la asamblea de vuestro barrio y ciudad. La acampada de Sol está jodida: entre los secretas infiltrados y los perroflautas, sumado al cansancio de los veteranos, parece que la cosa tiene poco futuro. Más bien creo que después de este detontante el futuro está en manos de cada uno de nosotros. Sin líderes, construyendo nuestro propio programa, con la ayuda de internet, que se convierte en nuestra gran plaza, y en las plazas de los barrios, donde confluyen mayores y jóvenes, perros y niños, para aprender a pensar por nosotros mismos, y a unirnos para protestar contra los que nos expolian día a día de nuestros derechos. Los idiotas acusan al 15M de no saber lo que quiere. Pero yo os digo que tenemos muy claro lo que NO queremos.

Otro detalle interesante de esta semana, destapado por Público: el diccionario biográfico, que ha resultado ser algo más que de derechas...¿pero a quién se le ocurre darle seis millones de euros a una sola institución (anacrónica, nacida para la heráldica, llena de viejos que obtuvieron su sillón en el franquismo, sólo seis miembros menores de 50, sólo 3 mujeres) para que se marque una obra así, innecesaria, inmanejable, incontrolable, ilegible? ¡pues a Aznar, que fue quien aprobó la idea y la dotó de fondos! sí señor, de aquellos polvos...y dicen que la van a corregir...¡Que no la corrijan, por favor, ni un euro más para ese proyecto! Lo que tiene que hacer la academia de historia es dejarse de mamotretos y desaparecer: ya hay suficientes historiadores civiles que investigan y publican con seriedad y decencia. Y los demás seres podemos escoger qué libros leer sin que nos carguen semejante desatino a los impuestos.

Hablando de impuestos, y ya acabo. El viernes, durante la asamblea, llegamos a contar hasta cuatro furgonas de antidisturbios, dos motos, un coche o dos de policía y tipos de paisano "vigilando" nuestra pacífica reunión. ¿Es que no tenían nada mejor que hacer? Habrían sido mucho más útiles deteniendo a esos historiadores sinvergüenzas de la academia y ofreciendo sus mullidos sillones a los más mayores, que seguían la asamblea sentados en el suelo.