jueves, 25 de agosto de 2011

Steve se va


Y con él, termina una época en la que todo era posible. Otros, por muchísimo menos, han conseguido la santidad, pero él simplemente se recoge a sus cuarteles de invierno dejando que sus herederos lideren este nuevo mundo- Él fue el mesías que hizo el ordenador desde el que escribo, el cosito de música que cuelga de mis orejas, el smartphone que no tengo pero sin el que no seré nadie en unos pocos meses, del ipad que es un gran invento, la marca de los ricos. ¿Qué va a ser de nosotros?

De su vida se desprende una gran lección. Parece que nunca tuvo miedo a seguir su camino, por rarito que pareciera. Desde los comienzos en su garaje, nunca temió equivocarse, y cuando ya había hecho ricos a muchos parásitos y le echaron, se fue, y luego fue capaz de volver con bríos renovados para resucitar la compañía que casi habían hundido.
Y es que no todos los empresarios son malos. De hecho, algunos son la hostia, con perdón de las huestes católicas. Los menos. Porque a la mayoría les preocupa mucho más ganar más dinero cada año y ahora que la pasta no fluye, siguen queriendo hacerlo aún a costa de lo que sea, del futuro de sus empleados, de sus clientes y de la sociedad misma. ¿Qué va a ser de nosotros?

Santo Steve de nuestras entretelas, dinos: ¿quién ha sabido retirarse como tú? eres el opuesto mismo de los dictadores que llevan su régimen hasta el límite, aunque apeste como el cuadro de Dorian Grey y ellos se consuman en la cama mientras lo dejan todo atado y bien atado (me viene al pelo pensar que Franco se relamerá en su tumba viendo cómo va España). Tú te vas, y dejas una empresa llena de posibilidades, creativa, llena de gente con ilusión, esperamos que parecida a ti, heredera de tu forma de ser. Pero ¿qué va a ser de nosotros?

La noticia de tu retiro (que sabemos que estás muy malito) nos llega en tiempos oscuros. En un pueblo de nuestra piel de toro han quitado de sus calles nombres que no les sonaban de nada, como Pablo Neruda o Pablo Iglesias...para bautizarlas como calle de la Selección Española, que sí les suena. ¿Qué se puede esperar de un país que lo que más lee es el Marca? ¿de un país que maltrata y asesina toros a la mínima excusa? (ups, es que es una fiesta tradicional) ¿de un país que se rinde al papa aun sin creer, y que ha parido al Kiko (léase: grano grande de maíz tostado) que pretende evangelizar ni más ni menos que a China? En fin, compañeros, ¿qué se puede esperar de un país con un partido único, el PPSOE, todos de derechas enculados por el mercado (y no precisamente por mi pescadero, que esta bueno, un lobezno con olor a sardina)?

Creo que se nos va la pinza. ¿Que nos queda, Santo Esteban de los Trabajos, ahora que te vas? Pues mira chaval. Nos queda Sol. Como bien sabe tu Apple, que va a abrir megatienda donde una vez ondearon las pancartas del 15M cuando la plaza era nuestra. Seguramente entre todos los indignados hagamos cosas tan grandes como tú soñabas. Y que tú lo veas desde donde sea.


martes, 23 de agosto de 2011

Chicas, a convertirse tocan!



Soy una floja, una frívola, una petarda.
Los festejos papistas de la semana pasada, alabados y seguidos por millones de personas; los inflamados discursos del papa, llenos de sabiduría; los prudentes políticos, adoradores del becerro de oro de los mercados, tan atentos a no ofender a los cristianos, me han convencido. Mis propios vecinos y montones de personas de a pie han expresado muy claro y alto su desdeño por los que protestamos. Son tantos y están tan seguros que tienen que tener razón:
Los indignados no somos más que una pandilla, un grupúsculo, molestos y desafiantes, perroflautas, manipulados, odiosos...
Y yo, simplicísima, me he olvidado del humanismo, de la ilustración, de la ciencia, del progreso...he visto informativos, he leído editoriales, he abierto mi mente al discurso dominante y me he convertido.
Pero no ha sido sólo por la fe. Me ha empujado la necesidad de estar a la moda, perfectamente preparada para los oscuros días que vendrán.

Atentas chicas. Este invierno volverá el eterno traje negro, con la falda bien decente justo a la altura de la rodilla. Deberemos ser muy femeninas, llevando altos tacones que nos conviertan en figurines y nos impidan caminar como seres normales. Los domingos y fiestas de guardar nos cubriremos el cabello. En otras latitudes podría ser con un burka, pero esto es España, así que usaremos peineta y mantilla.
Olvidaremos todos los derechos que hemos ido conquistando en el último siglo, como el derecho a llevar minifalda sin que te violen por ir provocando, a pedir el divorcio, a usar anticonceptivos, a abortar, a no dejar que los hombres nos aticen impunemente. Ignoraremos e incluso encubriremos al pederasta que eventualmente abuse de nuestros hijos; votaremos como mujeres de bien, siempre a la derecha, a un partido que preserve nuestros valores tradicionales. Alabaremos la censura y el pensamiento único.
Todas las que trabajen, a ver cómo se apañan a cuidar de su maridito y su familia como prioridad. Las que no estén casadas deberán buscar un marido con urgencia y profesar el sacramento del matrimonio. Las demás pueden dedicarse a engrandecer a la iglesia católica haciéndose monjitas, que hay falta de vocaciones, o en su defecto a vestir santos, almidonando puntillas, cosiendo puñetas y bruñendo altares.

Creedme chicas. Esto es lo que viene, he visto la luz. Si queréis estar à l'avantgarde, no olvidéis mis consejos y convertíos. Tomad ejemplo de todos estos visitantes cristianos, maravillosos ejemplos de devoción, de los kikos y del mismo Rouco. No hablemos del papa con su estilazo.
Y si tenéis dificultades para aguantar esta vida, tenéis varias salidas: endrogaros mucho o pecar a voluntad para luego confesaros y conseguir el perdón.
Se llama Hipocresía y funciona mejor que cualquier droga.

lunes, 15 de agosto de 2011

¿Paletos? ¡Me cagoendiós!

Aldeaquemada (Jaen) a la puesta de sol

Dice en la tele un curita atildado de mediana edad y supongo que cargo sobresaliente que los laicos (los que protestamos contra la visita de benito16) somos unos paletos.
Como diria homer simpson: paletos, hmmmm...

Acabamos de volver de un delicioso fin de semana en Jaén. Nos rodeaban montes, olivares, ríos secos llenos de ranas, dehesas llenas de caza,
carreteras llenas de curvas...al lado de un pueblo minúsculo pero excelentemente trazado con escuadra por Carlos III. En fin, una delicia. Y se preguntarán usted por qué.
Primero, porque estábamos en un sitio donde todo es verdad. En Despeñaperros, increíble paraje geológico, natural e histórico. Allí las rocas tienen presencia: la tierra pasa de un rojo llameante a un granate azulado, y las piedras dibujan estratos y plegamientos. Los olivos brotan en líneas perfectas dibujando la fuga de los montes, y cuando acaba la tierra cultivada, nace la dehesa y el monte. Al amanecer te despiertan los disparos de los cazadores y los ladridos de sus realas. Se come ciervo y jabalí, tomate de verdad y hay pinturas rupestres (en un aparte os diré que he pasado tres días obsesionada por ver este abrigo con pinturas de caza levantinas y al final, cuando por fin llegamos -oh, España nuestra- estaba rodeado de una imponente verja y en cambio las pinturas expuestas al sol, prácticamente desparecidas...matadme, pero he dejado abierta la verja para ver si algún grafitero mejora la miseria de nuestra edad del bronce).
En Despeñaperros la cosa es fácil: sabías que si te atacaba un señor con trabuco, era José María Tempranillo, el bandolero. No como ahora, que te roba todo dios.
A lo que iba: después de comer dos días en esta tierra, de rodar por sus caminos, de alternar en sus calles con los lugareños, yo quiero ser paleta. (Más aún, si es un insulto para el señorín de alzacuellos) Y estos son mis motivos: viven tranquilos, en contacto con la naturaleza y con sus vecinos. Sin ambiciones exageradas...ajenos a nuestro estrés capitalino, a nuestro afán por figurar, a nuestra hipocresía. En esa tierra de ladridos lejanos y águilas en el cielo, uno podía olvidarse de madrid tomada por hordas de cristianos dispuestos a disfrutar de una ciudad abierta de piernas. Disfrutad mientras podáis, malditos jóvenes de sombrerito naranja, no deseo que se os atragante el menú del peregrino sino algo mejor: que muchos de vosotros, llevados por el entusiasmo, encontréis el amor, en un viaje de metro a mitad de precio, en Chueca o donde sea...un primer amor carnal y poderoso que os haga olvidar el viacrucis y el rezo comunitario, en suma, fuera de estos fastos nefastos a los que, muy a nuestro pesar, invitamos todos los españoles.
Vivo con dolor estos días terribles del rearme de la derecha, pero me queda el placer de sentirme paleta. El puto cura tenía razón. Prefiero la tierra a la sal de la tierra, la carne de cerdo al cuerpo de cristo, cualquier perro del barrio al cordero pascual, una encina centenaria a la santísima trinidad; mi compromiso es con la razón y el derecho y detesto el dogma, sea cual sea. Ah, y solo respeto las creencias si ellas me respetan a mí. Dicho esto, viva Jaén, viva Carlos III y mecagoendiós. Este invierno llevaré boina.
Y este miércoles 17 me encontraréis, junto con un montón más de paletos, en la mani de Europa laica, a las 19:30 en Tirso de Molina.
Ea!




martes, 9 de agosto de 2011

Zapatero, no vayas


Llega el JMJ, cuando el papa va a llenar madrid de prosélitos. Nada menos que un millón o dos, dicen. Ya no son las molestias -el retiro atestado de pecadores camino del paseo del perdón, chueca abarrotada de cristianos en saliendo del armario, los perroflautas de mochila que ocuparán el colegio de mi calle-. Es que este señor de blanco, además de hacer su meeting a la juventud meapilas mundial, va a bendecir a tutti quanti, los reyes y plíncipes, banqueros empresarios; y por supuesto, a los políticos. Incluido tú, Zapatero.
¿Por qué vas? Si total ya le conoces, has estado con él más que suficiente. Además, con el intérprete por medio, la cosa resulta muy poco íntima: no podéis deciros nada bonito al oído.
Y por encima de todo, si ya has dicho que lo dejas, no vayas. Si igualmente te van a poner a parir, hagas lo que hagas. Ahora no te debes a nadie más que a tu conciencia, de militante del PSOE y sobre todo de persona humana con principios. Zapatero, no veas al papa. Representa todo lo contrario que un presidente de gobierno de izquierdas puede tolerar. No le des la mano, no sonrías, no te inclines para besarle el anillo. Está hecho del mismo metal que lleva esclavizando a las ideas del renacimiento, de la ilustración, del progreso, durante siglos.
No vayas a ver al papa, Zapatero. Y vete en paz.

sábado, 6 de agosto de 2011

Para qué sirve el 15M


El viernes hubo asamblea en la Conce. Como todos los viernes a las ocho, nos sentamos en la plaza Virgen de Romero un grupo variopinto de personas para hablar de nuestras iniciativas y actividades, de la APM (asamblea de pueblos de madrid) y cómo no, a debatir sobre los acontecimientos de esta semana en el centro de nuestra ciudad, en donde la policía ha reprimido con violencia a los grupos de personas que intentaban hacer uso de las calles según su voluntad, cerrando con estilo militar la puerta del sol y atizando con saña a propios y extraños hasta generar protestas, jaja, hasta del pp.
La asamblea empezó con poca gente y la noticia de que Sol estaba abierto. había una mani y los más jóvenes fueron para allá. en la plaza nos quedamos una cincuentena, y se estableció un debate sobre qué somos, qué pintamos y qué futuro tiene el movimiento 15M. Como persona visceral que soy, me viene muy bien asistir a debates tranquilos, bien argumentados, en orden, y que me ayuden a comprender por qué me pide el cuerpo sentirme del 15M. Y estas son mis conclusiones del día:
el 15M ha servido para recuperar el ágora: el movimiento ha hecho que los vecinos nos sentemos por primera vez en la plaza en décadas a hablar de nuestros asuntos, de las cosas que nos quitan el sueño, en un foro abierto donde todo el que quiera tiene voz y voto. Desde los temas más locales, como que la piscina del barrio lleva equis años cerrada (y sin noticias de que ni la junta municipal ni un puto político mueva un dedo para abrirla) hasta los recortes en lo público desde la próxima privatización del canal de YII hasta el horror que se va a cometer en los institutos eliminando interinos, tutorías...este mismo mes de septiembre...y más allá, sobre esos mercados que nos amargan la vida.

...ha servido para recuperar la solidaridad: el hecho de sentarnos y hablar es posible gracias al compromiso y la solidaridad de personas que han conseguido, regalado o cedido sillas, megafonía, carteles, ordenadores, hasta un local; de personas que participan en comisiones, que contactan con otras asambleas, que dedican su tiempo a los demás porque creen que otro mundo es posible. De personas que salen al micro a ofrecer sus propuestas, sus ideas, sus emociones.

...y está sirviendo para recuperar nuestros derechos fundamentales: en este siglo de los avances tecnológicos y del confort, era muy necesario que la gente despertara para recordar que nuestros derechos están siendo pisoteados y recortados a diario, y a nivel mundial, por un sistema perverso basado en el dinero y en el egoísmo y la rapacidad de unos pocos millares de cabrones. Impidiendo desahucios (ahora los hacen con nocturnidad y alevosía); manifestándonos contra los recortes de lo público, hablando con claridad de los desmanes de los políticos, difundiendo la verdad. Y era muy necesario que la chispa la encendieran los jóvenes. Ahora ya no hay vuelta atrás. Sabemos muy bien quienes son los enemigos, con siglas, con nombres y apellidos, y no nos vamos a callar porque tenemos el derecho y el deber de construir otro futuro desde nuestra indignación.

en fin, que no sé si cortar el tráfico y enfrentarse cara a cara con los cuerpos de seguridad es el camino...Aunque me gusta tomar la calle, sobre todo porque es nuestra y un puñado de políticos vendidos al capital no tienen que decirme qué toma de la calle es legal y cual no lo es. Pero lo que prefiero es tomar la calle desde mi barrio, desde mi gente, y sé que juntos vamos a definir ideológicamente nuestro movimiento y conseguir cambiar las cosas. Y hay mucha leña que cortar. No somos un grupo de molestos protestones, ni un problema de orden público. Estad atentos al presente y al futuro: Vamos despacio porque vamos lejos.