jueves, 6 de octubre de 2011

Qué semana de mierda


De acuerdo, llevamos un mal año, un par de ellos, así que ya deberíamos estar acostumbradas. Pero es que sigo cabreándome cada vez que escucho las noticias en la radio. Debe ser masoquismo, pero es que el café me sabe mejor con radio nacional... creo que fue el lunes, descubrí que para un juez murciano, que un marido maltratador llame zorra a su mujer es un halago admirativo. Seguramente sería martes cuando se habló de los retiros millonarios de los responsables de arruinar las cajas. Los tertulianos daban vueltas al tema desde sus micros de cristal y hablaban de debatir y de legislar tropelías e injusticias, que si los consejos politizados, que si el banco de españa, bla bla bla. Luego vino la cifra del paro, más de ...¿cuántas eran? ¿90.000 personas? una vez pasada la cosa veraniega, los contratos temporales que tanto le gustan a la derechona, los recortes de interinos, los recortes, los recortes...El miércoles escuché la radio por la tarde, y allí Vicente Romero nos contaba, con lágrimas en la voz, la situación de los miles de refugiados de Somalia camino de Kenia, sin comida, sin luz, sin la menor esperanza, sin la presencia de una sola agencia internacional, los tan bien pagados y cuidados funcionarios de la onu o del acnur, ni siquiera de la cruz roja...simplemente porque es un lugar peligroso. En Africa oriental era de noche, como en todo el mundo...¡Qué distinto valor tienen las vidas!
Hoy me ha amargado el café saber que en Rota tendremos base de la otan, (cómo recuerdo mi primera vez en las urnas, cuando voté no a la otan...vaya éxito, si es que una es demócrata por vicio) otro de esos últimos gestos de zapatero, del que ya no voy a decir ni una palabra más.
...y mucho peor, hemos sabido de la muerte de Steve Jobs, unos pocos años mayor que esta que les escribe. Se lo ha llevado un cáncer, pero me parece que lo mismo podría haberse muerto de asco, vista la situación que los once millones de inmigrantes irregulares sufren en EEUU, en estados como Texas o Alabama, cuyas leyes les criminalizan hasta extremos inconcebibles. Pobre Steve, ya le despedimos desde este foro cuando le vimos tan malito. Pobres de nosotros, dije entonces. Y es verdad que hoy estamos más solos, en manos de gestores inútiles, políticos desalmados, criminales millonarios, perversos cómplices de la destrucción de la justicia, de la ética y de la belleza del mundo. Me voy a la cama, pero con miedo. No imagino que noticias horrorosas nos contará la radio mañana.

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